Sesión 3: Una pesadilla vivida

PROPÓSITO El estudiante comprenda que existen relaciones sanas y otras nocivas, las cuales deben romperse.

Introducción

Comente que la clase más concurrida en una universidad fue la de un profesor que se le ocurrió ofrecer un curso titulado “Terminar una relación sin desbarrancarse”. Pinky le confiesa a Alicia que perdió la consciencia durante una cita con un muchacho mayor. Alicia y Pinky ponderan la posibilidad de que Pinky haya sido “violada en la cita,” y Alicia le aconseja poner término a esa relación.

Lectura

–Cuéntame, ¿quién era? –preguntó Alicia–. ¿Cómo era? –Era mayor que yo –dijo Pinky y luego, describió lo que había sucedido. Ellos habían salido sólo por un par de meses, pero Pinky creía estar enamorada de John, principalmente porque él le prestaba atención cuando nadie más lo hacía y porque a veces la escuchaba. Ella sabía que él bebía y consumía drogas recreativas (el éxtasis era su favorita). De hecho, ella también bebía y a veces consumía drogas con él, pero una noche ocurrió algo extraño.

–Simplemente perdí el conocimiento –le contó a Alicia–. Me dio una bebida que preparó en la cocina y luego me quedé dormida al instante. No supe que pasó. Cuando me recuperé, estaba acostada en su cama. Él me dijo que sólo me dejó dormir, pero no le creí. Pienso que tuvo sexo conmigo mientras yo estaba inconsciente, así que continué preguntándole pero él seguía negándolo. Finalmente se aburrió de todas mis acusaciones y me dijo que desapareciera de su vista. Pero aún me pregunto ¿por qué perdí el conocimiento después de tomar esa bebida? –Quizás fue la combinación de alcohol y droga –dijo Alicia–. A veces se producen reacciones extrañas; creo que no es una buena idea consumir alcohol o drogas en una cita, porque puede ocurrir cualquier cosa cuando un montón de químicos fluyen por tu sangre. No actúas como eres en realidad, ya que no tienes el control de tu cuerpo –continuó Alicia mirando a Pinky a los ojos–, y si él tuvo sexo contigo cuando estabas inconsciente, se trata de violación. Nunca le diste tu autorización, ni tampoco tu consentimiento. Tener sexo con alguien que no está dispuesto a hacerlo es violación, así de simple. –Bueno, en otras ocasiones habíamos llegado bastante lejos –dijo Pinky. –Eso no importa. Aunque hubieran tenido relaciones sexuales otras veces, si esa vez él lo hizo sin tu autorización o consentimiento, se trata de una violación. –¿Incluso si estuve a punto de hacerlo antes con él? –preguntó Pinky impactada. –Por supuesto –dijo Alicia–. Debes estar dispuesta o es una violación. Este tipo parece ser un desalmado –señaló Alicia–. ¿Por qué se te ocurrió considerarlo como un posible novio? Pinky soltó un bufido y añadió: –Supongo que porque él no quería algo de inmediato. Como dije antes, estuvimos de novios por un par de meses y aún no habíamos hecho nada. Alicia dio un suspiro. Estar a cargo del proyecto del patio recreativo para la comunidad la había forzado a enfrentar ciertos temas que hubiese preferido ni siquiera imaginar. Sin embargo, ella sabía que existían algunos recursos disponibles para personas como Pinky. –Escucha –dijo Alicia–, deberías hablar con la orientadora de la escuela acerca de esto. Ella tiene contactos con centros donde ayudan a mujeres que han sido violadas. Prestan apoyo legal, físico y psicológico. Cualquier persona que haya sufrido una violación necesita ayuda en todas esas áreas, Pinky. ¿Es por eso que te cortas? –Por eso y por todo. Además, ¿cómo podría alguien probar que él me violó? Yo estaba completamente inconsciente. –¿Eras virgen, Pinky? –se atrevió a preguntar Alicia. –Sí, por supuesto –Pinky se ruborizó–. Aunque supongo que nunca te lo hubieras imaginado, ¿cierto? Alicia contuvo una risa de alivio. No quería que Pinky pensara que se estaba riendo de ella. –Entonces tienes suerte en cierto sentido –le dijo Alicia a Pinky–. Hay una manera infalible de saber si fuiste violada o no. Si aún eres virgen, un doctor lo puede comprobar, entonces él no te violó. Alicia alentó a Pinky para que le contara todo lo que había pasado a sus padres. Pinky no parecía dispuesta a hacerlo. Su madre era madre soltera y tenía problemas con el alcohol. A pesar de esto, Alicia le insistió en que confiara en su madre. –Ahora que ya te libraste de eso –dijo la madre de Pinky–, no se te ocurra quedar embarazada. Alicia respiró fuertemente cuando escuchó la reacción de la madre de Pinky. –La virginidad no es algo de lo que debas librarte, como si fuera un dolor de cabeza –dijo Alicia–. Es algo valioso, como un tesoro que guardas para entregárselo a la persona correcta. –Algunas chicas se alegran de ponerle fin a eso, me refiero a cuando lo hacen por primera vez –le comentó Pinky. –Lo sé, pero yo no pienso de esa manera. De todos modos, debes ver a un doctor –insistió Alicia. Pinky obtuvo el permiso de su madre para ir al doctor a realizarse un examen completo y una prueba de embarazo. –Si estás embarazada, no te molestes en volver a casa –le dijo su madre. –Lamento mucho haberle contado todo a ella –dijo Pinky con ira–. ¿A dónde se supone que debo ir si estoy embarazada? ¿A la calle? –Veamos ese punto más adelante –dijo Alicia seriamente–. Probablemente ella está asustada por ti y no sabe cómo decírtelo. Después de examinarla el doctor le dijo a Pinky: –Tu himen está intacto. Nunca has tenido relaciones sexuales. Pinky estaba muy emocionada. –¡Antes nunca pensé que podía ser algo tan valioso! ¡Qué alivio! ¡No estoy embarazada ni contraje una enfermedad! ¡Tampoco tendré que denunciar a John a la policía y pasar por todos esos problemas! –Es algo valioso –dijo Alicia–. Como una puerta que da al rincón más profundo de tu ser. Así que cuídala y sólo deja entrar al hombre que esté dispuesto a dar su vida entera por ti. Es así de valioso. –¿Entonces crees que John no puso nada en mi bebida? –preguntó Pinky preocupada. –Parece que no. Quizás fue la combinación del alcohol y las drogas –contestó Alicia–. Sin embargo Pinky, él te incentiva a consumir esas cosas, es mayor que tú y obviamente no confías en él, si piensas que pudo haber hecho algo como aquello. Deberías esta agradecida de que haya terminado contigo. –Por lo menos estuve con alguien –dijo Pinky tristemente. –¡Alguien que creías que te había violado mientras dormías, Pinky! Si no puedes confiar en alguien, no vale la pena tenerlo como novio, ni siquiera para estar con “alguien”, o sea, con cualquiera. Lo más importante es que te tienes a ti –le dijo Alicia–. Eres una gran persona y tú misma debes ser tu mejor amiga, cuidarte y convertirte en alguien que pueda atraer a un chico que te trate bien. –¿Alguien como Álvaro? –preguntó Pinky. Alicia la miró confundida. –Quiero decir, alguien que me trate como Álvaro te trata a ti –explicó Pinky. Alicia se quedó pensando. –Sí, alguien que te trate como Álvaro me trata a mí. –No ando detrás de Álvaro –le aseguró Pinky–. Antes sí, pero ahora no. Él es leal contigo y ahora que te conozco mejor, entiendo por qué. No pensaría en ningún momento en apartarlo de tu lado. –Te creo –sonrió Alicia–. Aunque Álvaro y yo no tenemos intenciones el uno con el otro. Pinky miró a Alicia de manera escéptica. –En todo caso, creo que la mejor persona con la que puedes andar por el momento, eres tú. Aprende a conocer y a querer a Pinky que, por lo que veo, es una gran chica –dijo Alicia motivándola de manera amigable. –¿Tú crees? –preguntó Pinky queriendo obtener una respuesta esperanzadora de Alicia. Y ésta le contestó: –Sí, pero lo más importante, es que tú también lo creas.

Escucha ahora la explicación del profesor

Relaciones poco sanas

Como se relata en la lección Alicia hace ver a Pinky que la relación en la que se encuentra no es lo mejor ya que no confía en la persona con la que está Otra razón por la que la relación no es sana es por los motivos que Pinky tiene para estar con John es porque no la trata bien, al punto que la indujo al consumo de alcohol y drogas.

Pinky estaba con John no porque le gusta sus habilidades sino porque al menos la escuchaba de vez en cuando y le daba afecto físico. Un indicador de una relación mal sana de cualquier tipo es cuando una persona entrega más de sí misma, mientras que la otra sólo recibe sin deseos ni intención de retribuir o corresponder al cariño o atención recibidos. Otro indicador es cuando a partir de la relación la persona no está mejor. Es frecuente que cuando una relación es buena la gente comente: “que bien se te ve” , “estás radiante”, “¡se te ve mejor!”Una relación mal sana descuida al a persona y eso se evidencia en su estado habitual. Otro indicador es que la persona no crece a nivel personal, no se ve mejoría en su modo de ser ni un crecimiento en sus cualidades. Un elemento más es que la persona pierde seguridad y confianza en sí misma, la relación no afirma su persona y por lo tanto le resta valía personal.

Actividades de refuerzo

…Reconocer relaciones sanas de las que no lo son. Cuando comenzamos una relación, muy a menudo nos deslumbra el enamoramiento del primer momento y no podemos ver la realidad de los sentimientos o de las intenciones de esa persona, que nos permitan definir si la relación es sana o no lo es. Sin embargo, hay actitudes que nos podrían servir de indicadores para ir diferenciando el tipo de relación que estamos manteniendo.

1. Tu novio o novia insiste en conocer a tus padres y hermanos

2. Te pide que estén solos constantemente y se molesta cuando compartes con tu familia

3. Quiere estar contigo en horarios en los cuales tienes clases o debas estudiar

4. Te motiva y te ayuda en los estudios y respeta los horarios de clases

5. Está pendiente de consumir alcohol y/o drogas y te ofrece para que también consumas

6. Te cuida y no permite que consumas sustancias nocivas

7. Conversa contigo sobre el futuro juntos

8. Cambia la conversación cuando tratas de hablar de un compromiso serio

9. Constantemente te pide tener relaciones sexuales aún cuando no desees

10. Respeta tu decisión de no tener relaciones sexuales

Resumen

Evitar situaciones de riesgo

Ha quedado claro que una relación que no es buena no busca el bienestar de la otra persona por tanto el que menosprecia el valor del otro no lo va a cuidar. Es así que en muchas relaciones poco saludables los o las jóvenes son inducidos a ir a lugares peligrosos, a consumir sustancias perjudiciales y a pasar por situaciones de desprotección e incertidumbre. No es poco común las noticias sobre el consumo de éxtasis y situaciones en fiestas en las que muchas jóvenes resultan drogadas y sufren de algún tipo de abuso. Es bueno tener claro qué es sano y qué es una conducta que implica riesgo. Si tenemos una amistad que sabemos tiene costumbre dudosas no se debe temer el ponerle límites en situaciones en la que uno dude de su seguridad. Son momentos de incertidumbre en donde quien es sano puede dudar y hasta creer que está exagerando pero no existe exageración cuando se trata de cuidar nuestra integridad. Mas importante que estar en “en algo” es el saber estar. Por tanto, no cedamos a la presión social ay que el grupo cuando más grande es menos capacidad de discernimiento tiene y por tanto menos pensante es. Por tanto no hay que dejarse llevar por los que menos piensan, hay que guiarse de los consejos de aquellos que bien nos quieren y siempre han cuidado de nosotros: nuestros padres, los buenos amigos o un tutor

Actividad para la casa

Contestar estas preguntas

1. ¿Qué importancia tiene el diferenciar una relación sana de una nociva? ¿Qué consecuencias podría traerte el no saber distinguirlas?

2. ¿Qué aspectos positivos pudieras resaltar de una relación sana? ¿Cuál es el futuro de las relaciones sanas? ¿Y cuál es el futuro de una relación nociva?

3. ¿Te has preguntado alguna vez si las relaciones que tú has procurado han sido sanas o nocivas para otros? ¿Cuáles de tus acciones crees tú que han significado para otros una relación nociva? Descríbelas.