Sesión 5: Liderazgo para todos
PROPÓSITO Que el alumno se dé cuenta que ser líder requiere la ejecución de acciones que cuestan empeño para alcanzar grandes metas.
Introducción
Comentar una situación difícil por la que haya pasado una persona, familia o pueblo y preguntar qué piensan del relato si piensan que pueden sacar algo positivo de esa situación.
En la clase de liderazgo se conversará sobre cómo aquellas situaciones que nos exigen, que requieren de nuestro esfuerzo sirven para formar y fortalecer el carácter.
Lectura
Mientras se preparaban para entrar a la clase de Personalidad y Liderazgo, Andrés confió en Ramón sus dudas al respecto. –Mira, esto puede ser interesante, pero no entiendo bien como lo puede estar dando una mujer. ¿Cómo va a saber lo que es liderazgo masculino? No sé si me voy a quedar… vamos a ver como nos va. Asintiendo, Ramón le hizo un gesto de callarse antes de que los pillaran. Al entrar vieron que en la pizarra estaba puesta una pregunta: ¿CUÁL ES LA FORMA FÁCIL DE DESARROLLAR EL CARÁCTER?
Los alumnos se sentaron, mirando la pregunta con variadas expresiones y murmurando varios comentarios, hasta que Sonia pidió silencio y les advirtió: –Esta pregunta es una pregunta capciosa… –y se rió–. ¿Quién me la quiere contestar? Ramón, más precavido que los demás, respondió: –Supongo que nos va a decir que no hay una manera fácil… ¿No? –Lamentándolo mucho, así es; esa es la verdad –le dio la razón Sonia–. ¿Alguien me quiere decir por qué no hay una manera fácil de desarrollar el carácter? Álvaro, para quien el llegar a tener buenas notas había costado un esfuerzo bastante considerable, fue el primero en contestar, con voz lenta y pesada: –¡Porque to-do lo bue-no cues-ta! ––Así es la triste realidad… –bromeó Sonia y luego agregó–. Pero la realidad alegre es que una vez que logramos vencer el miedo al esfuerzo, el esfuerzo es interesante y hasta divertido. ¿Se acuerdan de las primeras prácticas de rugby, muchachos? ¿Se acuerdan de cómo les costó a ustedes, muchachas, cuando empezaron a entrenar para el vóley y la gimnastica? Pero miren como ahora les encanta… Entonces, ¡vamos con lo del carácter! Sonia siguió: –Como Álvaro ha dicho, tal vez con “conocimiento de causa”, es necesario el esfuerzo tanto para desarrollar el carácter, como para desarrollar los músculos, la matemática, o cualquier otra cosa… con la salvedad de que ¡el carácter es más importante! Lo otro que voy a decirles es… ¡Has adivinado, Sofía! Oí lo que murmuraste: que no están empezando ahora, sino que llevan años desarrollando ese carácter, probablemente sin saberlo. –Hay muchas cosas difíciles por las que se han esforzado. Desde que eran recién nacidos tienen cosas por aprender y han aprendido: a respirar y a chupar, pasando por cuando aprendieron a caminar, a montar bicicleta, patineta, saltar a la cuerda, leer… y aprender a leer cuesta, si recuerdan bien… y tantísimas cosas más –enumeró la profesora–. Todas ellas les costaron esfuerzo y concentración. Pero con cada esfuerzo ustedes se fueron fortaleciendo. Lo que pasa es que las primeras cosas que aprendemos son casi obligatorias… como comer. Luego aprendimos cosas en la niñez que nos permitieron, por ejemplo poder jugar con los demás, y también nos costaron concentración y dedicación. La patineta, por ejemplo, les costó varias caídas antes de aprender… ¿Me siguen? ¿Algún comentario? Luego de una corta sesión de divertidos recuerdos acerca de caídas y heridas sufridas por varios alumnos en su aprendizaje de variadas destrezas, siguió Sonia: –Y ¡que satisfacción tan grande cuando somos expertos en algo! A medida que crecemos, sin embargo, es cada vez más fácil evitar el trabajo del aprendizaje. Algunos temperamentos son más “lanzados” y aventureros para hacer algo que resulta difícil o que da miedo, como andar en bicicleta, o aprender a nadar. Otros temperamentos son más prudentes y estos, si no se obligan, fácilmente pueden perder la oportunidad de aprender, y pueden resultar cobardes. Es por eso que los padres naturalmente tratan de obligar a sus hijos a atreverse con las cosas.
¿Cuáles son las cosas que hoy les parecen difíciles, y que les sirven para seguir construyendo ese carácter, y que en su momento valdrán bien la pena? Piensen en cuáles son las cosas que si logran aprender ahora, en plena adolescencia, les darán satisfacción en toda la vida adulta. Hubo un silencio largo mientras los alumnos cruzaban miradas, tenían ideas, resolvían si sonarían inmaduras, y esperaban a que alguien dijera algo. –Sacar un buen diploma es una –se atrevió Raúl–, para tener un buen trabajo y no tener preocupaciones, claro. –Ciertamente –comentó Sonia–. ¿Algo más? –Manejar las decisiones amorosas inteligentemente, como se estudió el año pasado –aventuró Julia. También, asintió Sonia. Y siguió preguntando; –¿Algo más? ¿Algo que tenga que ver con lo que los demás piensan de ustedes? –Claro, que otros sepan que somos responsables, puede hacer que se nos dé más libertad; también hemos visto eso –agregó Ramón. –Aha... y para que nos den un buen trabajo tenemos que tener esa fama y debemos también ser honestos, claro –completó Raúl. –Ok, entonces no tenemos que seguir enumerando estas cosas – recortó Sonia–, ya se ve que entienden que la práctica de las virtudes de la perseverancia, la prudencia, la honestidad, etc., tienen muchas ventajas. Además, como es un esfuerzo, a veces un gran esfuerzo, esto nos robustece el carácter. El hombre o la mujer que sabe obligarse a hacer lo que es difícil, ha adquirido un carácter que le va a permitir llegar lejos, conquistar mundo, alcanzar metas ambiciosas; y, muchachas y muchachos, tendrá liderazgo: será respetada o respetado. Esa persona tendrá renombre, entre los que lo conocen, como alguien que hace lo que dice y consigue lo que quiere. Esto es seguro. Y no estoy diciendo que necesariamente será ningún santo ni héroe. De hecho hay, y han habido, muchas personas de carácter, con metas egoístas y ambiciones desmedidas, que también han conseguido todo lo que han querido… y han sido azotes para los demás, como los dictadores famosos… o en un plano más local, como el bravucón del barrio. El dictador y el bravucón tienen en común un carácter formado para liderar. Han superado el miedo de lo difícil. Lo que varía es que sus valores, sus metas, sus ambiciones, no son virtuosos… Usualmente su motivación es el poder o la riqueza. En el aula hubo un nuevo silencio y ambiente de desacuerdo. El concepto de carácter robusto, combinado con liderazgo negativo les hacía sentir incómodos, aunque no sabían expresar por qué. –Chicos y chicas: tenemos que ser realistas –prosiguió Sonia sintiendo la disconformidad en el aula–. Durante los años de la adolescencia tomamos, queriéndolo o no queriendo, sabiéndolo o sin saberlo, muchísimas decisiones. Todos los días, a toda hora. Y estas decisiones van formando nuestro carácter, y nuestra realidad futura. Si a la edad de ustedes toman constantemente decisiones basadas en valores sólidos– que son sus acciones–, y superando las dificultades que estas pueden presentar, al llegar a ser adultos tendrán un carácter robusto y propenso al éxito. Si, por desgracia sus acciones, esas pequeñas decisiones de toda hora, son tomadas en aras a evitar el trabajo, evitar lo difícil, esquivar la realidad, y sólo buscando metas egoístas, al llegar a ser adultos van a tener un carácter de corrupto o de malandro. Ahora, para la próxima clase quiero que hagan un poco de investigación en internet para que hagamos una lista de líderes “para bien” y líderes “para mal” a fin de poder ilustrar este punto. Quiero una buena frase que describa a cada uno y que muestre en qué lideraba. El liderazgo positivo ha construido nuestro mundo. El liderazgo negativo, como verán, es lo que a veces nos impide progresar o destruye lo hecho.
Escucha ahora la explicación del profesor
A. Sin esfuerzo no se desarrolla el carácter
“una vez que logramos vencer el miedo al esfuerzo, el esfuerzo es interesante y hasta divertido. ¿Se acuerdan de las primeras prácticas de rugby, muchachos? ¿Se acuerdan de cómo les costó a ustedes, muchachas, cuando empezaron a entrenar para el vóley y la gimnastica? Pero miren como ahora les encanta”… Con frecuencia queremos que las cosas nos resulten fáciles. El esfuerzo y el sacrificio no son vistos con buenos ojos ya porque pueden complicar las cosas ya que si vemos que las cosas que nos proponemos cuestan mucho podemos desanimarnos en el camino y no lograr lo que nos proponemos. Cuando tenemos que superar dificultades para llegar una meta la situación nos demanda exigirnos mas, sacar lo mejor de nosotros e incluso aprender nuevas habilidades lo cual no solo nos llevará a la meta deseada sino a un proceso de aprendizaje y enriquecimiento personal ya que habremos desarrollado nuestro potencial desarrollando habilidades y cualidades propias que estaban esperando salir.
“llevan años desarrollando ese carácter, probablemente sin saberlo.” En cierta medida, es absurdo temerle o rechazar el esfuerzo ya que la vida misma nos plantea el reto de superarnos día a día para sobrevivir. Vivimos esforzándonos desde que nacemos, es más, el parto mismo es un abrirse paso a la vida. Y es que si esfuerzo no hay crecimiento, ni evolución. El plantearnos situaciones nuevas que implican cierto grado de dificultad es una invitación para la adquisición de nuevas habilidades
“Hay muchas cosas difíciles por las que se han esforzado. Desde que eran recién nacidos tienen cosas por aprender y han aprendido: a respirar y a chupar, pasando por cuando aprendieron a caminar, a montar bicicleta, patineta, saltar a la cuerda, leer… y aprender a leer cuesta, si recuerdan bien… y tantísimas cosas más (..). Todas ellas les costaron esfuerzo y concentración. Pero con cada esfuerzo ustedes se fueron fortaleciendo.” La conclusión a la que llega Sonia es muy cierta: “llevan años desarrollando ese carácter, probablemente sin saberlo.”
B. La vida te exige esfuerzo y aprendizaje constantes
Hemos dicho que el aprendizaje es constante, por lo tanto no es suficiente con aprender las habilidades básicas para sobrevivir en la vida. Cuando creemos que sabemos lo suficiente siempre surgen nuevas exigencias que implican la toma de nuevas decisiones y actitudes. ¿Cómo es nuestra actitud ante el esfuerzo que implica un nuevo cambio? ¿Vemos la nueva situación como una nueva oportunidad para aprender y crecer forjando nuestro carácter? Cuando una nueva dificultad se nos plantea ¿lo asumimos como un nuevo reto? ¿nos desafía positivamente o lo vemos como una carga que incomoda y cuesta asumir?
No todas las personas reaccionan de la misma manera porque no tienen el mismo nivel de energía. Esto no debería ser un obstáculo. Tenemos medios para salir adelante y aprender a hacer de cada exigencia una oportunidad para aprender. El primer medio, y más importante, son los padres, quienes nos impulsan y apoyan para que enfrentemos los obstáculos, aprendamos a resolverlos y en el proceso aprendamos sobre nuestros recursos, habilidades, fortalezas y debilidades. Otro medio son los profesores que nos guíen por el camino de la educación. Un tercer medio es nuestra inteligencia, la cual nos permite analizar la situación, aprender de ella e investigar hasta encontrar una respuesta correcta (con la ayuda de los padres o el adulto encargado que les ayude a elegir la mejor entre varias alternativas).
Actividades de refuerzo
Ejemplos de líderes:
Robespierre. Inteligentísimo, supo tomar el liderazgo de las reformas que pedían al Rey Luis XVI de Francia, pero por odio y ambición de poder, transformó su cometido no en una reforma, sino en la revolución más sangrienta y destructiva que se ha visto en la historia, matando a todos lo que tenían profesión o conocimientos.
Churchill. Periodista e historiador, hijo de un parlamentario de poco éxito, se destacó en varias posiciones por su valentía en acciones y palabras; supo inspirar a su país, Gran Bretaña, a resistir a Hitler, aun cuando contaba con pocos hombres y poco armamento y toda Europa se había rendido.
Hitler. Líder de gran talento que levantó a Alemania de la humillación y ruina de la Primera Guerra Mundial, y que por su odio, crueldad y resentimiento causó el exterminio de muchos millones de enfermos, de judíos, católicos, y cualquiera que estimaba “inútil”
Alejandro Magno. Joven militar griego, adorado por sus hombres por sus dotes de liderazgo que no sólo pudo defender a Grecia de los persas, para entonces el ejército más grande del mundo, sino que además llego a conquistar Persia, Afganistán, Pakistán, Babilonia, Egipto. Fue seguido a pie por sus hombres hasta el fin del mundo conocido en la época.
Stalin. Uno de los tres que hicieron la revolución bolchevique de Ru - sia lanzando el comunismo en el mundo. Consolidó su poder dicta - torial por 36 años sobre Rusia y gran parte de Europa y Asia, matan - do a millones de disidentes en los famosos Gulag.
Carlo Magno. Guerrero franco que unió a Europa luego del largo caos que siguió a la caída del Imperio Romano. Instituyó leyes cris - tianas humanitarias, orden y paz, fue el primer mandatario de la historia en establecer educación universal y obligatoria. Fue respe - tado y querido por su trabajo incansable que realizaba para el bien de sus pueblos.
Marqués de Sade. Joven de familia noble cuyo vicio era gozar infli - giendo dolor. Por él se lanzó una moda de crueldad espantosa que dio origen a las palabras “sadismo” y “sádico”.
Simón Bolívar. Joven de familia noble y de gran visión que asumió la tarea de independizar América del Imperio Español. Por su valen - tía, tenacidad y poder de convencimiento logró con pocos recursos liberar a Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia.
José de San Martín. Libertador de Argentina, Chile y Perú. Nació en Argentina pero no tuvo problemas de cruzar los Andes con un ejército para ayudar al libertador O’Higgins en Chile. Luego embarcó el mismo ejército hacia Perú, donde completó la independencia de ese país que lo quiso nombrar Protector (un cargo supremo) pero que él no aceptó, dejando el poder en manos del pueblo. Cumplida su misión libertadora volvió a Argentina pero viendo que los bandos políticos lo querían usar de emblema para ganar más poder prefirió irse a Francia para no ser factor de pelea. Allí murió sólo por su ab - negación para su patria.
Madre Teresa. Mujer con vocación de docente. Conoció las condi - ciones de total pobreza existentes en Calcuta y resolvió dedicarse a vivir con y como ellos para llevarles su amor y cuidados, por ver en ellos a Jesús. Con su ejemplo conmovió al mundo entero y es segui - da por muchas muchachas y mujeres que sienten una compasión semejante a la suya.
Juan Pablo II. Estudiante de literatura y teatro. Al ver los excesos de la Guerra y el Holocausto resolvió dedicarse a Dios para mejorar el mundo como sacerdote católico, defendiendo con gran valentía los derechos, la justicia y la solidaridad. Llegó a ser líder en la Iglesia en Polonia y luego como Papa fue un factor fundamental en la caída del Comunismo y la liberación de Europa Oriental.
Martin Luther King. Pastor protestante negro con una visión y un “sueño” de un país con iguales derechos para negros y blancos. Con gran valentía reunió en marchas y resistencia pacífica un enorme movimiento de opinión para quitar el “apartheid” en Estados Uni - dos. Pagó con su vida su osadía muriendo asesinado, pero su obra sigue y la dignidad de su pueblo crece todavía.
Edison. Joven curioso, sin medios. Él con una tenacidad increíble se dedicó a indagar cómo funcionaba todo lo que encontraba. Supo soñar que podría crear y atrapar electricidad para el uso de la hu - manidad. Inventó la iluminación eléctrica, el foco y miles de otras cosas incluyendo el toca-disco.
Henry Ford. Joven que viendo los primeros automóviles para gen - te rica, se propuso encontrar una manera de fabricarlos a un precio accesible para todo el mundo. Así llegó a inventar la línea de ensam - blaje, una novedad que permitió una modernización transformado - ra en la manufactura y que hoy utilizan de alguna manera todas las fábricas del mundo.
Florence Nightingale. Muchacha de familia noble. Movida por el sufrimiento de los enfermos, particularmente los heridos de guerra, se superó enormes dificultades, y se dedicó a modernizar sus cuida - dos y a fundar la escuela de enfermería moderna.
Elizabeth Fry. Joven señora de familia acomodada y muy cristiana. Conmovida por la condición de las cárceles, particularmente de mu - jeres, se expuso a toda clase de peligros, y aportó su propio dinero y el de su esposo para lograr la reforma de las cárceles en Europa y América del Norte.
Juana de Arco. Muchacha que sintió la llamada de Dios para libe - rar a su país, Francia, de la ocupación británica, y como voluntaria animó con palabras y acciones a un ejército derrotado a ganar las victorias necesarias para terminar al fin la Guerra de Cien Años. Su empeño le costó la vida, cuando fue quemada viva por los ingleses por ser considerada una “bruja”.
Boadicea. Mujer británica resistente de la conquista romana de su isla Inglaterra. Cuando mataron al Rey, su esposo, tomó el mando y ganó brillantemente muchas batallas con audacia e intrepidez. Su fama ha durado 2.000 años aunque finalmente murió derrotada.
Santa Brígida. Mujer sueca. Por amor a Dios se dedicó a socorrer a las víctimas de las violentas batallas de espada, lanza y flecha que dejaban morir comidos por buitres a un gran número de heridos. Su trabajo atrajo a muchas otras mujeres compasivas que se organi - zaron como congregación religiosa. Su hábito todavía incluye un casco.
Marilyn Monroe. Actriz de talento. Utilizó su belleza para lanzar una moda de liberación sexual. Después y a pesar de su enorme éxi - to, murió sola: se suicidó.
Napoleón. Joven militar de familia noble. Con genio militar con - quistó desde Francia toda Europa. Su éxito reposaba sobre las re - formas sensatas y justas que dieron fin al desastre de la Revolución Francesa; fracasó cuando sus ideas de grandeza lo llevaron a em - prender conquistas imposibles y olvidó por completo el bien y las vidas de los soldados de su ejército.
Resumen
No basta desarrollar sólo el carácter
“ ya se ve que entienden que la práctica de las virtudes de la perseverancia, la prudencia, la honestidad, etc., tienen muchas ventajas. Además, como es un esfuerzo, a veces un gran esfuerzo, esto nos robustece el carácter. El hombre o la mujer que sabe obligarse a hacer lo que es difícil, ha adquirido un carácter que le va a permitir llegar lejos, conquistar mundo, alcanzar metas ambiciosas; y, muchachas y muchachos, tendrá liderazgo: será respetada o respetado. “ Pero qué pasa cuando no se toma en cuenta los calores y las virtudes. Los objetivos planteados pueden carecer de una orientación buena y se puede caer en un liderazgo negativo.
El dictador y el bravucón tienen en común un carácter formado para liderar. Han superado el miedo de lo difícil. Lo que varía es que sus valores, sus metas, sus ambiciones, no son virtuosos… Usualmente su motivación es el poder o la riqueza. Es importante mencionar esto ya que los jóvenes se encuentran en un período sensible de muchos cambios que les exigirán tomar nuevas decisiones que irán afectando su carácter y su forma de entender la vida. En la medida que las decisiones tomadas descansen en valores sólidos se irán adquiriendo actitudes buenas que se consolidarán en virtudes.
Pero de lo contrario se dejan llevar por el camino más fácil, dejándose llevar por los impulsos, deseos, placeres o metas egoístas la voluntad se inclinará hacia las pasiones y loso actos poco nobles. Este es el caso de aquellos líderes que a falta de una correcta formación personal y afectiva son los responsables de actos de corrupción, violencia y opresión.
