Sesión 3: Los retos de la bioética

PROPÓSITO: Afianzar los conceptos fundamentales sobre los temas relacionados con la bioética en los últimos años, reconociendo la dignidad de la persona humana.

Introducción

Visión general de la antropología humana teniendo en cuenta que la vida física es un valor fundamental, el respeto a la dignidad de la persona, libertad y responsabilidad y la totalidad. Además, tener en cuenta los principios de la bioética: autonomía del paciente, ausencia de daño, beneficencia y justicia.

Lectura

Luego de conversar con su padre, Betty estaba resuelta a ayudar a su amiga Julia. Lo que su padre le aconsejó fue que la acompañara y la apoyara y que, si tenía oportunidad, le sugiriese siempre que perdonar y amar es lo mejor. Ella se puso esas dos consignas en la cabeza y siguió adelante. Pero la vida en el colegio continuaba. En esos días el profesor de biología les encargó un trabajo sobre bioética. La bioética es una ciencia relativamente nueva que estudia los problemas morales que representan los avances sobre todo de la medicina. Como era en grupo, Betty y Juan se juntaron para trabajar con Julia y Esteban, otro chico del salón. Esto es más o menos lo que pudieron averiguar de los temas que les tocaron.

La vida humana

La vida humana comienza desde el momento en que se junta un óvulo y un espermatozoide. Es un principio aceptado por todos que la vida humana se debe respetar siempre. Por eso es un principio de la bioética que la vida se debe cuidar y respetar desde que se encuentra en el vientre de la madre hasta que la persona muere «de muerte natural».

A.– Fecundación artificial.

La fecundación es la unión entre el óvulo y el espermatozoide, lo que da origen a una nueva vida. Esto normalmente se da en el vientre de la madre luego de un acto sexual normal si en la trompa de Falopio se encuentra un óvulo. Esta condición de fertilidad sólo dura 100 horas al mes (3 días y medio). Pero hay parejas que por muchos motivos no pueden tener hijos en forma natural. Es lo que se llama «matrimonios estériles». La medicina ha buscado formas de resolver estos problemas. Una forma de hacerlo es ayudando al cuerpo a cumplir sus funciones. Por ejemplo puede ser que el óvulo no salga normalmente del ovario, o que las Trompas de Falopio tengan alguna dificultad o que el número de espermatozoides en el hombre no sea el suficiente. Para todo esto hay soluciones que ayudan al cuerpo a cumplir su función, como los tratamientos con hormonas (las hormonas son las sustancias que posibilitan al cuerpo hacer todo esto), o maneras sofisticadas de conocer exactamente el momento de la fertilidad, el cual puede ser muy corto (se trata de que la pareja mantenga relaciones sexuales en el momento justo, avisados por análisis científicos). Pero hay otras formas más complicadas. Son las llamadas de «fecundación artificial». Se dice artificial porque reemplazan a las personas en su función de padres. Hay diferentes técnicas, que se pueden dividir en dos grupos:

Inseminación artificial: cuando se introducen dentro de la Trompa de Falopio los espermatozoides previamente tratados. El principal problema moral de esta técnica es que no se está ayudando al cuerpo, sino reemplazando la función de procreación, que tiene que ser siempre a través del acto sexual. Se está alterando la naturaleza, no ayudándola. Además suele ser riesgoso pues es frecuente que se den embarazos múltiples, lo que pone en peligro la vida de la madre. Algunos dicen que eso traería menos problema que el embarazo natural y mejoraría la naturaleza. Pues estudios recientes en caballos de carrera han demostrado que los caballos que nacen producto de estas técnicas no mejoran su rendimiento. Una prueba de ello es que no han ganado todavía ninguna carrera. Es evidente que la ciencia no mejora la naturaleza, en todo caso la empeora un poco.

Fecundación in vitro (FIVET o Bebé de probeta): cuando se toman fuera del cuerpo de la madre los óvulos, luego de un bombardeo hormonal para causar una ovulación múltiple, se los junta con los espermatozoides del padre en un laboratorio donde se hace la fecundación. Ahí, en un tubo de ensayo, hay nuevas vidas. Luego se introduce varios de esos niños en el útero de la madre para que sólo uno siga creciendo. Por lo general se sacan hasta 6 óvulos y se fecundan, con lo que hay 6 vidas en el laboratorio. En cada implantación se suelen utilizar 3 de los que sobrevive 1. Los otros 3 quedan congelados hasta que se los utilice en otro intento (pocas veces logra salir a la primera) o hasta que se los mate descongelándose o se experimente con ellos. Con esta técnica se reemplaza y viola la naturaleza. Con el agregado de que se matan los bebés ya concebidos (de 6 fecundados sólo vive uno). Se manipula la vida como un juego de ruleta rusa, donde el médico selecciona al que va a sobrevivir. Las dificultades que se dan en esta técnica son: un altísimo porcentaje de fracaso; daño a la salud de la mujer, por el bombardeo hormonal, que puede desbalancear permanentemente su funcionamiento hormonal; la posibilidad de manipulación de los embriones sobrantes y una alta incidencia de enfermedades genéticas, porque los espermatozoides no tienen que pasar por una selección natural que sucede con la concepción natural y cuyo mecanismo todavía no se entiende bien. En este sentido se dice que esta técnica ayudará a eliminar enfermedades y a «hacer» seres humanos más perfectos.

Esto es la manipulación genética. El resultado que ya mencionamos sobre los caballos de carrera ponen en duda semejante pretensión. Ahora bien, la obtención de esperma y óvulo pueden ser en la misma pareja, por lo que la técnica es conocida como homóloga. Pero hay otras técnicas llamadas heterólogas en las que o el esperma o el óvulo son obtenidos de otra persona. En este caso es como si en la relación de pareja se metiera un tercero. Además últimamente se ha prestado a la compra y venta de gametos, incluso en internet, llegando su precio a ser altísimo. En todo caso todo está en contra del derecho de un niño de nacer de padre y madre. Se ha dicho que se tiene derecho al hijo. En realidad no es así, porque el hijo es una persona con los mismos derechos que los padres (y que los esclavos, por ejemplo). Los derechos se tienen sobre las cosas, no sobre las personas. Si se dice que se tiene «derecho» al hijo una de dos opciones: o se está tratando al hijo como a una «cosa» (con lo que se lo rebaja) o se tendría que reconocer que «algunas personas» pueden ser dueñas de «otras personas» y deberíamos volver a aceptar la esclavitud como en la antigüedad. Pero no se puede negar la ilusión que a la pareja le hace tener un hijo. Ante esto está siempre presente el recurso de la adopción. Siempre ha sido un poco complicada, sobre todo porque los estados tienen que cerciorarse de que los padres que adoptan serán buenos padres y no lo hacen «por divertirse». Pero es un buen paso para un niño que ya está en este mundo. De otra forma parece que la adopción «en probeta» se ha hecho demasiado fácil, con sus muchísimo más grandes problemas.

Otro problema reciente es la clonación. La clonación aprovecha la posibilidad de manipulación que da la FIVET para obtener un embrión no a partir de óvulo o espermatozoide sino de una célula (que incluso teóricamente puede ser cualquiera) de sólo un individuo. De este modo el hijo «copia» exactamente el modelo del padre o madre únicos. Esta técnica (que no ha sido utilizada aún en humanos) agrega a todo lo mencionado en la FIVET la violación de un derecho básico del hijo: nacer por padre y madre. Además algunos hablan de la limitación de la biodiversidad, por la cual la naturaleza va mezclando individuos distintos para que los nuevos hijos sean un poco más perfectos. De esta manera, según prevén ellos, incluso las especies animales se verían afectadas.

B.– Eutanasia.

La eutanasia es matar a una persona con la pretensión de que no sufra. El problema es que nadie tiene derecho a quitarle la vida a otro (eso se llama asesinato). Lo que sucede es que a veces la gente y los médicos creen que el dolor es muy fuerte y que es mejor que «se muera rápido» antes de que sufra. Ni aún así se tiene derecho a quitarle la vida a otra persona. Hoy en día existen modernas técnicas para el control del dolor que permiten una vida digna al paciente. En realidad muchos de los que defienden la eutanasia lo hacen pensando en «quitarse de en medio» los viejos cuyas vidas ya no sirven para nada (según ellos, por supuesto). Éste es otro atentado contra los derechos humanos. En situaciones normales, todo moribundo lucha por vivir. El mayor sufrimiento que puede llegar a tener el enfermo no es provocado por la enfermedad sino cuando siente que nadie lo quiere. Este sufrimiento es tan grande que la persona ya no desea vivir más. Pierde toda esperanza y fuerza para sobrellevar su enfermedad. Llegar a este punto es una negación de la misión del médico: el médico está para ayudar a la vida, pero por la eutanasia más que nada busca la muerte. Resolver el problema al enfermo no es matarlo, sino ayudarlo a pasar con dignidad los últimos días que naturalmente le toquen en la tierra. De lo contrario pueden darse casos absurdos. En Holanda, donde hay una ley que permite determinada forma de eutanasia, los viejos no van a los hospitales porque tienen miedo de que alguien decida por ellos y terminen muertos. La eutanasia es mezclar el sentimiento con el egoísmo y decir que es científico. Es distinto del encarnizamiento terapéutico. Puede ser que un médico, por ganar prestigio o porque crea que le hace un favor al paciente, prolongue la vida de una persona que normal-mente estaría muerta, mediante grandes y costosos aparatos y haciendo sufrir al paciente. Esto también es violar la dignidad de la persona humana.

Existe un principio llamado de «proporción» en los medios utilizados que dice que se puede aplicar una técnica si se espera de ella alguna mejoría para el paciente o que esa técnica le puede beneficiar más que perjudicar (sería una técnica proporcionada). Si no lo va a beneficiar, si no lo va a curar y le va a provocar sufrimientos innecesarios, lo mejor es no aplicar esa técnica, porque es desproporcionada. Este puede ser el caso de grandes y costosos aparatos cuando científicamente no se puede esperar más que la muerte, tarde o temprano (sería una técnica desproporcionada). Lo que nunca se le debe quitar al paciente son los medios ordinarios, esto es dar hidratación, alimentación mínima, limpieza y comodidad... y por supuesto la presencia cercana de aquellos más queridos para él, como los familiares. La muerte es natural para todos. Es violar un derecho humano tanto adelantar la muerte (eutanasia) como retrasarla fuera de lo racional mediante aparatos y haciendo sufrir al paciente inútilmente (encarnizamiento terapéutico). Cabe una última aclaración: los criterios sobre muerte son las generales de la ley. Sin embargo cada caso representa un desafío para el médico y los familiares, no porque no se entienda qué es la eutanasia, sino porque no se puede ver siempre claro, en ese caso particular, cuál de los criterios se aplica.”

Hacer este trabajo juntos ayudó a que Betty pudiese estar cerca de Julia y que ésta se sintiera apoyada. Pero además les ayudó a entender un poco más problemas que se discuten muchas veces y de los que antes ignoraban todo. Eran tiempos de descubrimiento y los temas como estos no hacían sino estar empezando.

Escucha ahora la explicación del profesor

Concepto de bioética. La bioética es una ciencia relativamente nueva que estudia los problemas morales que representan los avances sobre todo de la medicina. Por lo tanto está relacionada con el estudio del inicio y la preservación de la vida.

Algunos conceptos.

La vida humana. La vida humana comienza desde el momento en que se junta un óvulo y un espermatozoide. Es un principio aceptado por todos que la vida humana se debe respetar siempre. Por eso es un principio de la bioética que la vida se debe cuidar y respetar desde que se encuentra en el vientre de la madre hasta que la persona muere «de muerte natural».

Fecundación artificial. La fecundación es la unión entre el óvulo y el espermatozoide, lo que da origen a una nueva vida. Esto normalmente se da en el vientre de la madre luego de un acto sexual normal si en la Trompa de Falopio se encuentra un óvulo. Esta condición de fertilidad sólo dura 100 horas al mes (3 días y medio). Pero hay parejas que por muchos motivos no pueden tener hijos en forma natural. Es lo que se llama “matrimonios estériles”. La medicina ha buscado formas de resolver estos problemas. Una forma de hacerlo es ayudando al cuerpo a cumplir sus funciones. Se dice artificial porque reemplazan a las personas en su función de padres. Hay diferentes técnicas, que se pueden dividir en dos grupos:

Inseminación artificial: cuando se introducen dentro de la Trompa de Falopio los espermatozoides previamente tratados.

Fecundación in vitro (FIVET o Bebé de probeta): cuando se toman fuera del cuerpo de la madre los óvulos, luego de un bombardeo hormonal para causar una ovulación múltiple, se los junta con los espermatozoides del padre en un laboratorio donde se hace la fecundación. Ahí, en un tubo de ensayo, hay nuevas vidas. Luego se introduce varios de esos niños en el útero de la madre para que sólo uno siga creciendo. Por lo general se sacan hasta 6 óvulos y se fecundan, con lo que hay 6 vidas en el laboratorio. En cada implantación se suelen utilizar 3 de los que sobrevive 1. Los otros 3 quedan congelados hasta que se los utilice en otro intento (pocas veces logra salir a la primera) o hasta que se los mate descongelándose o se experimente con ellos. Con esta técnica se reemplaza y viola la naturaleza. Con el agregado de que se matan los bebés ya concebidos (de 6 fecundados sólo vive uno). Se manipula la vida como un juego de ruleta rusa, donde el médico selecciona al que va a sobrevivir.

Eutanasia. La eutanasia es matar a una persona con la pretensión de que no sufra. El problema es que nadie tiene derecho a quitarle la vida a otro (eso se llama asesinato). Lo que sucede es que a veces la gente y los médicos creen que el dolor es muy fuerte y que es mejor que “se muera rápido” antes de que sufra. Ni aún así se tiene derecho a quitarle la vida a otra persona. Hoy en día existen modernas técnicas para el control del dolor que permiten una vida digna al paciente. La muerte es natural para todos. Es violar un derecho humano tanto adelantar la muerte (eutanasia) como retrasarla fuera de lo racional mediante aparatos y haciendo sufrir al paciente inútilmente (encarnizamiento terapéutico). Cabe una última aclaración: los criterios sobre muerte son las generales de la ley. Sin embargo cada caso representa un desafío para el médico y los familiares, no porque no se entienda qué es la eutanasia, sino porque no se puede ver siempre claro, en ese caso particular, cuál de los criterios se aplica.”

Actividades de refuerzo

1. Realizar un debate sobre los artículos citados y analizar hasta qué punto puede llegar la ciencia en la deformación del tratamiento de la vida humana.

2. Dirigir conclusiones sobre la necesidad de considerar la propia dignidad humana como un parámetro para saber los límites de la experimentación científica: no todo lo que se puede hacer es bueno hacerlo.

Profundizar en temas de bioética, aunque sea mínimamente, para no dejarse engañar ante argumentos sin sustento científico y no permanecer en la confusión general. En todos los casos insistir en que la base de análisis sea siempre el respeto incondicional de la vida desde la concepción hasta su muerte natural.

Resumen

Actividad para la casa

Análisis de titulares

1. Dividir a los alumnos en grupos de 4

2. Leer las notas que vienen a continuación.

3. Pedir que analicen información respondiendo a las preguntas consignadas que le dictará a cada grupo (puede dictar todas las preguntas a todos los grupos o una por grupo).

Eutanasia ¿Podría morirse, por favor? Por: Evan J. Kemp Jr., The Washington Post, Domingo 5 de enero de 1997 Hoy en día, un paciente que va a un hospital recibe de modo rutinario la opción de firmar un documento que pide que a uno no le resuciten si hay complicaciones.

Es el «DNR». Marjorie Nighbert, una mujer de 76 años, de Florida, fue hospitalizada en 1996, luego de un derrame cerebral. Antes de ser ingresada en el hospital, firmó una indicación en el sentido de que no se le aplicaran «medidas heroicas» para salvar su vida. Basados en tal orden, y bajo la petición de su familia, el hospital rechazó las peticiones de comida y agua de Nighbert, de acuerdo con reportes del Daily News del noroeste de Florida.

Un «comité ético hospitalario», -prontamente convocado- dictaminó que ella «no estaba médicamente competente para solicitar tratamiento». Hasta su muerte, diez días después, Nighbert fue atada a su cama para evitar que pudiera alcanzar las bandejas de los demás pacientes.

Fecundación artificial ¿Semen humano extraído de ratones? Peter Aldhous (New Scientist/ Diario El Mundo, España) Uno de los más importantes expertos en reproducción ha solicitado fondos para trasplantar células de testículos humanos a ratones. El fin es crear ratones productores de semen humano.

Preguntas para el trabajo por grupos:

a. ¿Qué principios de la bioética se violan en el primer artículo?

b. ¿Qué pasaría si Marjorie Nighbert fueras tú?

c. En el caso del segundo, ¿te parece lícito llegar al extremo de usar semen de ratón para humanos? d. ¿Qué pensarías si te enteraras que el semen que te dio vida fue producido por un ratón?

e. ¿Cómo se viola la dignidad de la persona humana en estos dos ejemplos?